Desmontando a mamá
Lo ha vuelto a hacer. Alison Bechdel, la que nos dejó sin palabras -por pura fascinación- en 2006 con su cómic ‘Fun Home’, repite en ‘¿Eres mi madre?’. Por más que no ignoro el fenómeno actual que vive la novela gráfica en los últimos años, y reconozco que disfruto alternando narrativa y ensayo con historias en viñetas, no comparto la pasión que muchos lectores sienten por este género. Pero sucede que con Bechdel no siento que esté leyendo un cómic: estoy leyendo, sin más. Si la americana contase sus historias de traumas familiares y laberintos psicológicos solo con palabras, creo que las disfrutaríamos igual.
No es fácil lograr un objeto artístico con esta mezcla de recuerdos familiares, sueños, metaficción, sesiones de psicoanálisis, citas de Virginia Woolf y referencias constantes a los ensayos de Donald Winnicott sobre el “ser falso” y el “ser real”. Estamos ya muy familiarizados con la autoficción, pero Alison Bechdel incorpora a ese contarse a uno mismo tal cantidad de sinceridad y cercanía con el lector, que abruma. ¿Suena emotivo? No te confundas: no encontrarás aquí ni un segundo de sentimentalismo. La autora está tan preocupada por construir su libro como por recomponer la relación con su madre (al igual que hizo con su padre en ‘Fun Home’), y en ambos planos consigue involucrarnos con el mismo interés, lo que origina un jugoso artefacto narrativo.
Alison Bechdel maneja a su gusto los saltos temporales (qué gran inicio, esas dudas compartidas con el lector sobre el mejor punto para comenzar una historia que no tiene principio), desarrolla sintéticamente teorías de psicoanálisis mientras nos cuenta un recuerdo, nos abre su diario sentimental… Lo que se propone con cada libro es reconstruir su propia historia, y para ello, como muchos de nosotros, echa mano de lecturas, conversaciones con familiares, teorías y novelas. Más que una historia, ‘¿Eres mi madre?’ supone pasar un tiempo en la mente de otra persona. Pero ojo, uno no sale indemne de la experiencia. Puede que pronto comiences a contarte a ti mismo en forma de viñetas…
Publicado en numerocero.es/critica/eres-mi-madr-una-tragicomedia/975
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